domingo, 21 de junio de 2015

Técnica de estudio 2: Organización del tiempo

La manera en que usamos el tiempo es una cuestión de hábitos que siempre pueden cambiarse.
Si estamos siempre corriendo para completar tareas urgentes, probablemente significa que estamos teniendo problemas para administrar el tiempo, para identificar prioridades, o adquiriendo el hábito de posponer las tareas.

¿Qué podemos hacer para estudiar mejor?

  • Tratar de crear un lugar –en lo posible fijo– para estudiar, con los elementos necesarios. 
  • Reconocer que estudiar es tan importante como las necesidades y requerimientos de los demás. Establecer límites a las interrupciones. 
  • Diseñar un horario personal de trabajo y utilizar un calendario visible. Para esto puede ser útil: 
    • elaborar una lista de todos los trabajos, exámenes y entregas con sus respectivas fechas;
    • priorizar las actividades ordenándolas según su importancia; 
    • identificar las horas de mayor energía y planificar las tareas y actividades que exigen mayor esfuerzo en esos horarios; 
    • reservar los horarios de menos energía para el descanso y las actividades más relajadas. 
  • Elaborar un horario realista que incluya tiempo diario de sueño, comidas, vida social y ejercicios y/o relajación y que incluya el tiempo de estudio por materias concretas (1 hora de ciencias sociales, 1 hora de matemática...)
  • Poner a prueba el horario diseñado: ajustarlo tras ponerlo a prueba por una semana. 
  • Observar y estimar con precisión el tiempo que lleva cada una de las actividades que se realizan.
  • Estudiar siempre a las mismas horas y en un mismo lugar favorecerá el nivel de concentración y el rendimiento, ya que irá creando un hábito.
  • Asegurarse de estudiar un número de horas suficiente como para aprobar los exámenes, sin agobios y prisas de última hora. 

¿Sabías que descansar hace muy bien a tu estudio? 

Las sesiones de estudio para una misma materia no deberían exceder de hora y media seguida, salvo en caso de examen. Es bueno un pequeño descanso y, luego, cambiar de materia o actividad, dejar de estudiar y hacer deberes.


La técnica de los egipcios
¿Sabés cómo hicieron sus pirámides? Trabajando duro y tomando breves descansos muy seguido.

Paso uno, antes de irte a dormir, hacé una lista con todas las cosas que vas a tener que hacer al día siguiente. 
Paso dos, durante el día, seguí la lista de tareas que armaste la noche anterior y agregá aquellas nuevas tareas que te hayan surgido.  
Paso tres, asignale a cada tarea cuántos egipcios vas a demorar en cumplirla. ¿Qué es un egipcio? Un espacio de 25 minutos de corrido en los que vas a prestar toda tu atención solamente a la tarea que estás haciendo. 
Paso cuatro, cada vez que se cumpla un egipcio, regalate una pausa de 5 minutos libres para despejarte y relajarte.
Paso cinco, andá tachando todas las tareas que pusiste en tu lista la noche anterior en la medida en que vayas cumpliéndolas (y pedíle a mamá y papá que te regalen una golosina cuando las cumplas todas)

Por ejemplo: la tarea de ciencias sociales me va a demandar dos horas, o sea 5 egipcios. Me voy a poner un reloj en mi escritorio y voy a empezar con la tarea muy concentrado. Siempre que pasen 25 minutos, voy a dejar de hacer la tarea y voy a aprovechar para merendar, ir al baño o salir al patio. Pero OJO, a los cinco minutos, voy a volver a hacer la tarea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario